Las Becas Pro Paz de Rotary: tejiendo una red comprometida.

Las Becas Pro Paz de Rotary: tejiendo una red comprometida.

En sí mismo el diplomado es un trabajo a tiempo completo. Desde el punto de vista curricular, el porcentaje de puesta en práctica de lo aprendido respecto a la teoría es casi equivalente. Con una estructura modular, abarca desde el análisis de conflictos (donde se aprende a identificar fases, causas y motivaciones y ventanas de oportunidad para la resolución de un conflicto) hasta herramientas para prevenir, mitigar y resolver un conflicto (como acciones no violentas, estrategias de comunicación y educación, métodos alternativos de resolución de conflictos, negociación y mediación). El profesorado ha sido tan variado como el contenido: desde generales militares de los Cascos Azules de Naciones Unidas, eméritos profesores universitarios, o profesionales mediadores en algunos de los conflictos más complejos de nuestro tiempo (el proceso de paz en Sudán del Sur, rol de mujeres en las mesas de negociación Filipinas, conflicto de Kosovo o la gestación del proceso de paz en Irlanda del Norte). Cada profesor aportó su propia metodología, a través de estudios de casos, talleres, análisis de medios de información o preparación de propuestas en clase. ¡Cada día era una propuesta multidisciplinar única! Una semana podría empezar con la exposición de una profesora de Universidad experta en comunicación y diálogo interreligioso, preparar por grupos una estrategia de acciones no violentas, seguir con la presentación de monjes budistas sobre el papel de la religión en la paz y acabar con la intervención de una joven activista Rohinya refugiada. La semana siguiente sería igualmente retadora: proponer acciones de resolución para conflictos del Líbano, Cachemira o Israel-Palestina, analizar los tribunales de justicia transicional tras el genocidio de Ruanda y el apartheid de Sudáfrica, resolver (a través del método role playing) un conflicto tri-nacional ficticio de contaminación de un río ante un tribunal supremo y acabar con debates sobre cómo promover la equidad de género en nuestros distintos ámbitos y países. En paralelo al trabajo grupal, hemos estado realizando de manera individual una investigación para ser presentada en seminario público. En mi caso he estudiado como las iniciativas locales de desarrollo sostenible presentan alternativas a un posible conflicto en la cuenca del río Mekong. Para ello he analizado las causas de disputa sobre gestión de aguas trasnacionales así como los mecanismos que los seis países que comparten la cuenca del río Mekong tienen implementados. Otras investigaciones se han centrado en la crisis de refugiados Rohinya, la violencia de género en barriadas en Kenia, los actores en conflicto en Colombia o alternativas a la violencia pandillera en Guatemala. Sumando a esta propuesta excepcional de curso, hemos analizado en campo dos conflictos: primero en el triángulo de oro del río Mekong en Tailandia y segundo en Banda Aceh en Indonesia. En el río Mekong hemos analizado las diversas facetas que pueden presentar los conflictos ambientales, cómo los acuerdos económicos entre países y la política inter-regional afectan a los medios de vida de las poblaciones ribereñas y cuáles son las propuestas de organizaciones locales para generar un desarrollo sostenible adecuado a sus necesidades. Por otra parte, Banda Aceh fue escenario de conflicto violento secesionista durante treinta años, siendo aplicada la ley marcial y cierre a la comunidad internacional durante los últimos diez del mismo. Cuando en 2004 un terremoto y posterior tsunami destruyeron la zona, en uno de los desastres naturales más devastadores de la historia reciente, el Gobierno Central de Indonesia y el Frente de Liberación GAM llegaron, en un tiempo récord, a la firma de un acuerdo de paz y desarme. Para entender mejor la implementación y posterior mantenimiento de la paz en la zona nos reunimos con militares, ex-guerrilleros, víctimas del conflicto secesionista, afectados por el tsunami, representantes de partidos políticos varios y organizaciones de la sociedad civil (escuelas, profesores de universidad, asociaciones de mujeres y  activistas de derechos humanos).     Dado el contenido y continuo esfuerzo por aportar lo máximo a las actividades hemos fortalecido in situ nuestras capacidades de diálogo intercultural y prevención de conflictos. ¡Todo ello hace extraordinario y único este curso de Rotary! Por ello quiero aprovechar para presentar aquí al nuevo grupo de profesionales comprometidos con la paz que se incorpora a la red de Alumni Pro Paz de Rotary:         Roshan es una de las Juezas más reconocidas de India; aunque retirada sigue reivindicando los derechos de mujeres y niñas/os y es contratada como mediadora en diversos casos. Kum ha vivido una guerra civil y su objetivo es liderar y apoyar el liderazgo que asegure la paz en su país, Nepal. Fatma es de Sudán del Sur, profesora de Universidad, enseña género, cambio climático y desarrollo rural. Trabaja con mujeres refugiadas e investiga el papel de las mujeres para mantener la paz. Chris es refugiado de la  guerra civil de Liberia, como residente en Estados Unidos ha creado una organización para dar apoyo a refugiados de África y facilitar el proceso de asimilación en sus nuevas comunidades. Tras el curso quiere generar un proceso de justicia transicional en Liberia con los refugiados de la guerra. Renata es Brasileira, experta en comunicación y mediación en NNUU, trabaja con múltiples actores distintos facilitando procesos. Stacy ha trabajado durante diez años como abogada del Estado y Jefa de Gabinete de abogados del Estado en Filadelfia (EEUU), su meta es reducir las muertes por armas de fuego en su estado. Tras el curso está planteando un proyecto de mediación en las cárceles. Saeideh es de Irán, debido a su trabajo de periodista especializada en Derechos Humanos y mujeres vive fuera de su país desde hace años. Actualmente termina su post-doc en India en materia de políticas públicas. Frank es Oficial de Infancia en UNICEF en Camerún, sus proyectos se centran en la protección de niños soldados reclutados por Boko Haram. Actualmente comienza su doctorado con una beca Erasmus Mundus. Hugo ha sido funcionario de Canadá para asuntos migratorios durante diez años, actualmente está trabajando en Etiopía como consultor en asuntos de refugiados en las fronteras. Ximena, originaria de Bolivia y actual residente en EEUU, es experta en Responsabilidad Social Corporativa y desarrollo sostenible. Sus objetivos se materializan en proyectos de emprendimiento juvenil y capacitación para jóvenes en situación de riesgo. Sammie es abogado ambientalista de Nigeria, trabaja para una ONG de protección ambiental, en conflictos relacionados con la tenencia de tierras. Actualmente planea cursar su doctorado en justicia transicional. Kirk es policía de Tejas, trabaja como enlace con las comunidades y sectores en situación de marginalidad y vulnerabilidad. Quiere generar propuestas para su distrito basados en el crecimiento económico de las personas de estos sectores. Wali es de Afganistán, especialista en políticas y administración pública. Trabaja como profesor de universidad y acaba de recibir una beca para cursar su doctorado. Es el miembro más joven de nuestra clase, tiene 28 años y su meta es ser Ministro de Educación. Jean-Noel es Canadiense, especializado en las relaciones entre militares y sociedad civil, actualmente está trabajando para Naciones Unidas en Myanmar en la crisis de refugiados Rohinya. Amaal es de Holanda y de familia refugiada Somalí. Es especialista en generar oportunidades para jóvenes en Qatar y actualmente es directora del único centro de análisis para el cuerno de África. Teresa es de México, es doctora y trabaja para asegurar los derechos de niños/as en zonas rurales e indígenas. Joanne de Canadá es profesional de la educación, ha trabajado en todo tipo de iniciativas, especializada en discursos interculturales y género y como el arte puede ser un canal de expresión importante en zonas de conflicto. Elizabeth es de Kenia, ha sido refugiada interna por la guerra en su país, actualmente es directora de una ONG que fortalece y capacita a mujeres contra la violencia de género. María es de Colombia, trabaja para la ONG japonesa Peace Boat recorriendo el mundo promoviendo los valores de paz y Objetivos de Desarrollo Sostenible. Su objetivo actual es trabajar en la implementación del acuerdo de paz en su país. Bia es nuestra compañera tailandesa, ha trabajado durante años en la frontera de Myanmar con refugiados. Teja de Eslovenia es especialista en diseño urbano y género. Maneja múltiples proyectos simultáneamente y su investigación para el curso está centrada en reducir la violencia de género en las escuelas. Milind es profesor de la Universidad de MIT-Puno, India, especializado en promover la paz a través de nuevas tecnologías.   En cuanto a mi, soy ambientóloga, especialista en educación ambiental, género y conflictos ambientales. He trabajado para Organismos Internacionales y organizaciones locales en España, Bélgica, Suecia y Perú promoviendo proyectos y procesos de desarrollo sostenible. Mis próximos pasos se orientan a culminar mi doctorado centrado en cómo la educación ambiental puede prevenir y/o mitigar conflictos ambientales       Participar en este diplomado ha significado una profundización en mis conocimientos en materia de prevención y resolución de conflictos así como la adquisición de herramientas especiales en análisis, mediación y negociación. Pero, más allá de potenciarme como profesional, ha supuesto un salto cualitativo en mi forma de entender nuestras posibilidades para promover la paz. La red de trabajo que hemos generado entre compañeras y compañeros de curso, junto con el equipo del Centro Rotary de Chulalongkorn y el profesorado internacional, tiene una capacidad exponencial para la colaboración. Si además consideramos que esta red forma parte de una comunidad amplia de rotarias y rotarios, las sinergias posibles son infinitas. El agradecimiento y orgullo de formar parte de esta comunidad de Rotary Pro Paz ha quedado de manifiesto desde antes de conocernos en Bangkok y sigue expresándose mientras compartimos nuestros avances post-curso, apoyándonos e ideando próximas actividades. Por ello sé que el mundo está lleno de esperanza, porque todas estas personas que trabajamos comprometidas cada día, estamos convencidas de que la convivencia en paz puede ser una realidad.   Abril 2018 Elisa Hernández de Pablo es.linkedin.com/in/ElisaHernandezdePablo        ]]>